La ansiedad es una reacción natural que nos ayuda a sentir cuando estamos en una situación de peligro. Este mecanismo de defensa no solo es normal, sino que también es muy útil, ya que nos proporciona las herramientas necesarias para adaptarnos a los hechos cotidianos y nos ayuda a discernir si debemos salir corriendo o defendernos en una situación de peligro.
Sin embargo, cuando este mecanismo en vez de ayudarnos nos incapacita es cuando sufrimos un trastorno de ansiedad. Es en estos casos cuando es preciso recurrir a una consulta psicológica para obtener los tratamientos para la ansiedad que necesitamos.
Igualmente, en algunos casos, podemos sufrir conjuntamente síntomas de depresión. Esto no es inusual, ya que la ansiedad nos impide realizar nuestra rutina del modo en que estábamos acostumbrados. En algunas ocasiones, este trastorno puede paralizar nuestra vida por completo, por lo que es totalmente natural sentirse abrumado y deprimido.
Tratar la ansiedad en una consulta psicológica
Es sumamente importante que recibamos los tratamientos para la ansiedad que sean precisos, para así evitar que desarrollemos otros trastornos mentales como, por ejemplo, la depresión.
El objetivo de acudir a una consulta psicológica es que podamos dejar de vivir con el miedo constante que nos provoca la ansiedad. Es decir, las personas que sufren agorafobia, pueden dejar de exponerse a las situaciones que causan este trastorno o que temen que podría desencadenar el miedo que sienten.
Esta conducta evasiva es contraproducente para los distintos ámbitos de nuestra vida. Y es que, cuando hacemos esto, estamos dejando que el miedo maneje nuestro día a día y le estamos otorgando todo el poder, por lo que dejamos de gobernar nuestras propias vidas.
En conclusión, aunque sufrir un trastorno de ansiedad puede aturdirnos y paralizarnos, lo mejor es acudir a una consulta psicológica especializada, para poder tratar nuestro trastorno de ansiedad debidamente y retomar las riendas de nuestra vida.